viernes, 21 de marzo de 2014

Eduard Bagritsky




DULCEMENTE ME DESMAYO

Dulcemente me desmayo
del aire quieto y los sueños,
Del prolongado tedio penetrante
y el vacilante canto:
Me gustan los gallitos
bordados en lino blanco,
Y los íconos austeros
el hollín multisecular.
Con devota humildad
el día sigue al día
Bajo el sofocante zumbido de las moscas.
Una codorniz masculla
bajo el abatido cieloraso,
Y el dulce de frambuesa perfuma las festividades.

Por la noche el tierno ganso relleno nos deja afectados,
Y la agobiante lámpara-ícono parpadea en tormento.
Y, cuello estirado, el gallito bordado

Sobre el lino inicia su interminable cacareo.

Me concediste acá, Oh Señor, un humilde refugio
Debajo de un generoso techo,
exento de las preocupaciones cotidianas
Donde días pesados,
como cucharadas de dulce,
Fluyen espesamente gota a gota.

No hay comentarios:

Publicar un comentario